Calificado como el ‘mejor destino enoturístico del mundo para visitar en cualquier época del año’ por la revista Usa Today, la región cuenta con ocho zonas Denominación de Origen (Portalegre, Borba, Redondo, Reguengos, Vidigueira, Évora, Granja/Amareleja y Moura) y tres rutas del vino: la ruta de S. Mamede, al norte de la región, donde se producen vinos de fuerte color e intensidad aromática; la ruta histórica, que recorre todos los viñedos del centro del Alentejo, como Borba o Reguengos de Monsaraz; y la ruta del Guadiana, que sigue el río que le da nombre.
Antes de adentrarse en los viñedos conviene acercarse a las instalaciones de la asociación Ruta de los Vinos de Alentejo, una sala de degustación ubicada en pleno centro histórico de la ciudad de Évora. Aquí podrás degustar los mejores vinos de la región y conocer las diferentes variedades de uva de Alentejo.
Arte y diseño en el epicentro del Alentejo
En el corazón de la región del Alentejo, muy cerca de la bodega romana más antigua de la península Ibérica, Quinta do Quetzal ofrece a sus visitantes la posibilidad de visitar una espectacular bodega de diseño, rodeada de viñedos y naturaleza, con un centro de arte contemporáneo a estrenar. La galería de arte acaba de estrenarse hace apenas un mes, y ofrece a sus visitantes diferentes obras de artistas internacionales.
Asimismo, Quinta do Quetzal cuenta con un magnífico restaurante, con una cocina inspirada en el Alentejo y unas vistas impresionantes a los viñedos y demás plantaciones de la finca; y diversas actividades relacionadas con el mundo del vino, entre las que destacan sus catas -de vinos y de gastronomía local-, y sus visitas guiadas por los viñedos y por las exposiciones de su centro de arte.
Hoteles-bodega para soñar
El hotel Torre de Palma se ubica en el Alto Alentejo, muy cerca de la aldea de Vaiamonte. Construida en el año 1338, esta villa señorial adopta el estilo de vida de sus antiguos propietarios, la familia Basilii, y ofrece a sus visitantes una estancia de ensueño perfecta para disfrutar de una escapada de bienestar y enoturismo. El hotel incluye diferentes tipos de alojamientos, entre ellos, ocho casas típicas alentejanas, un loft rural, una casa señorial y ocho habitaciones muy acogedoras ubicadas en un edificio que antiguamente se utilizó como granero. Entre sus instalaciones podemos encontrar un lujoso spa con una piscina cubierta, otra exterior, un jacuzzi y una sauna turca. De todos sus servicios y actividades, cabe destacar su amplia variedad de masajes y sus magníficas sesiones de pilates.
Spa, clases de cocina y de pintura, tratamientos de vinoterapia, un restaurante gourmet… Herdade da Malhadinha es uno de esos alojamientos que no pone límite a la imaginación y que consigue hacer de cada experiencia, un recuerdo inolvidable. Perfectamente integrado en la bucólica planicie del Alentejo, este impresionante hotel-bodega ofrece a sus huéspedes unas instalaciones de primer nivel y todo tipo de actividades relacionadas con el mundo del vino: catas, catas temáticas, picnics entre viñedos… y todo tipo de experiencias personalizadas.
Otra buenísima opción para dejarse mecer por los viñedos del Alentejo es Nova ou A Serenada, un hotel de ensueño situado en plena sierra de Grândola, que ofrece a sus visitantes catas de vinos, talleres temáticos, visitas a sus viñedos y a su bodega y numerosas actividades outdoor para disfrutar de su entorno: paseos en globo y en bicicleta, picnics, rutas desenderismo, etc.